ANATOMÍA OCULTA DEL SER HUMANO...

domingo, 19 de septiembre de 2010

 






Somos mucho más de lo que apenas podemos ver y tocar físicamente...

La anatomía del ser humano va mas allá de la parte física y para comprender mejor los temas abordados en estas notas, iremos explicar un poco sobre los cuerpos o vehículos que forman el conjunto del ser humano.


Cuerpo físico, es nuestro cuerpo de carne y hueso, es el vehículo con el cual nos expresamos en la tercera dimensión o mundo físico. Este cuerpo está sujeto al tiempo y por lo tanto llega el día en que paran sus funciones biológicas y el metabolismo.

Es la muerte física de este vehículo.

Cuerpo vital es simplemente la sección tetradimencional del cuerpo físico.

También es conocido como aura, cuerpo etérico o “lingan sarira”.

Es posible fotografarlo a través de la foto Kirliam.

Es este cuerpo que da vitalidad y calor al cuerpo físico. Cuando el cuerpo vital empieza a se deteriorar, porque también está sujeto al tiempo, el cuerpo físico irá por el mismo camino. Cuando se da la muerte del cuerpo físico el cuerpo vital también se desintegra.

El cuerpo vital está constituido por 4 éteres:



Éter reflector

Éter luminoso

Éter químico

Éter de la vida

El primero de estos éteres se relaciona con las diferentes funciones de la voluntad y de la imaginación.

El segundo se relaciona con las percepciones sensoriales y extras sensoriales.

El tercero se relaciona con los procesos bioquímicos del organismo.

El cuarto éter sirve de medio a las fuerzas que trabajan con los procesos de reproducción de las especies.

Cuerpo astral es el vehículo con el cual nos expresamos en el mundo astral o mundo de los sueños.

Este vehículo no esta sujeto al tiempo, pues es gobernado por leyes distintas de las tridimensionales y tetradimensionales.

Es un vehículo de la Quinta dimensión, no muere ni se desintegra cuando ocurre la muerte física.

Este cuerpo está ligado al cuerpo físico por un cordón de plata, o también lo llamamos de hilo de la vida y en el oriente de Antakarana. Es un hilo de energía que solamente es roto en el momento de la muerte física.

Con el cuerpo astral podemos actuar conscientemente fuera del cuerpo físico y visitar los diversos lugares del mundo astral. Es lo que se conoce por desdoblamiento astral, proyección astral, etc.

Cuerpo mental es el vehículo con el cual nos expresamos en el mundo mental, que también se encuentra en la quinta dimensión, por eso, así como el cuerpo astral no muere ni se desintegra cuando ocurre la muerte física.

Aquí hemos citado los vehículos o cuerpos que tenemos y que nos sirven para actuar en las distintas dimensiones de la naturaleza. Todo vehículo necesita de un “ conductor ”,algo o alguien que lo conduzca.

A continuación veremos lo que anima estos vehículos y lo que realmente somos.

Esencia, conciencia o alma es de hecho lo que tenemos de más noble. Es una parte divina que se expresa en las distintas dimensiones a través de los vehículos antes mencionados.

Es lo que realmente somos, pero, infelizmente está demasiada adormecida y aprisionada en nuestros muchos defectos psicológicos (el yo) y difícilmente consigue expresarse.

La esencia es inmortal.

En un niño recién nacido la Esencia se expresa libre de defectos psicológicos, tornando esos niños bellos, inocentes y adorables.

Infelizmente con el pasar de los años la Esencia vuelve a ser aprisionada en los distintos “Yo” y aquella belleza espontánea se acaba.

Con la muerte mística vamos libertando y fortaleciendo la Esencia y por tal motivo, despertando conciencia, nuestro auto conocimiento y nos aproximando de la divinidad.

Ego es el conjunto de todos nuestros defectos psicológicos, también llamados de “Yo” o detalles del ego. A pesar de ser de naturaleza inhumana también es lo que somos.

Con la Esencia aprisionada difícilmente se expresa, quién actúa en nosotros es el ego.

Como referencia podemos decir que nuestra constitución interior es la siguiente:

3% de Esencia libre (mas adormecida).

97% de Esencia aprisionada en nuestros diferentes “Yo”.


Esos “YO” son como muchas personas viviendo dentro de nosotros, cada uno con sus voluntades, opiniones, deseos, pensamientos, etc. Cada una de esas “personas” lucha por el poder, para ser el comandante de la máquina humana.


En el Tibet Oriental es enseñada, por los auténticos iluminados la doctrina de los muchos egos, allí son llamados de agregados psíquicos.

El ego es pluralizado, es el conjunto de muchísimos “Yo” o defectos psicológicos que fueron creados y son alimentados por nosotros mismos.

El ego no muere cuando ocurre la muerte física, sigue viviendo en la quinta dimensión. Cuando la esencia retorna en un nuevo cuerpo físico el ego vuelve a reincorporarse junto y continua manteniéndola adormecida y aprisionada.

El ego es eliminado a través de la muerte mística, que podemos hacerla aquí y ahora de forma voluntaria y conciente, o será desintegrado en las infras dimensiones de la naturaleza, en un proceso lento y doloroso.

Es la llamada segunda muerte...