VEDÁS Y UNA PALABRA DEL MAHARSHI..

martes, 14 de septiembre de 2010

 


Se denomina Vedás a los cuatro textos sánscritos que forman la base del extenso sistema de textos sagrados del hinduismo.

La palabra vedá proviene de un término indoeuropeo relacionado con la visión (*weid-). En sánscrito literalmente significa ‘conocimiento’.

Los textos védicos se desarrollaron dentro de lo que se denomina la cultura védica, basada en castas (varna o ‘color’) y āśramas (etapas de la vida).

Cada himno de los Vedás provee el nombre de su autor (Anguiras, Kanua, Vásishtha, Vishuámitra, etc.). Probablemente se trata de clanes más que de autores individuales.
Shruti y smriti
Artículos principales: Shruti y Smriti

En conjunto, los cuatro Vedás, los Upanishads y los Vedanta sutras se llaman shruti (‘lo escuchado’), la revelación comunicada oralmente por Dios a algunos sabios en el pasado.

Se usa este término śruti en contraposición al de smriti (‘lo recordado’) que es el resto de la literatura védica: los Puranás, los Itijasa (historias, como el Majábharata y el Ramaiana), etc., que se consideran explicaciones escritas por el mismo Viasa para ayudar a los humanos a entender los crípticos Vedás.

Los tres primeros Vedás fueron la división principal original, también llamada trayī (‘[la] triple’, esto es:

* el Rig vedá (el recitar poético),
* el Iáyur vedá (uso del sacrificio) y
* el Sāma vedá (cánticos).[1]

Esta triplicidad se introduce en los textos bráhmanas (en el Shatapatha Bráhmana, Aitareia Bráhmana y otros), pero el Rig vedá es el único trabajo original de los tres, que junto a los otros dos desarrollan el concepto.
Cada Vedá se subdivide en dos partes claramente identificables:

1. Mantras, esto es, las palabras de oración y adoración dirigidas al fuego, a alguna forma del Sol o a alguna forma del aire, cielo, viento, etc. con pedidos de riqueza, salud, longevidad, ganado, hijos, victoria, e incluso perdón de los pecados (Ver el «himno Gáyatri», la oración secreta que cantan los bráhmanas tres veces al día).
2. Bráhmana, consistente en vidhi y artha-vāda (es decir, explicaciones detalladas para llevar a cabo ceremonias en las que se podían utilizar con provecho los mantras).

Así como los Vedás eran sólo tres, los mantras son también tres:

1. Rich (Rig), los cuales son versos en alabanza, con métrica, compuestos para ser recitados en voz alta, y plegarias litúrgicas para recitar en los sacrificios (homa).
2. Iáyus (Iáyur), que están escritos en prosa, y se supone que solo pueden ser murmurados durante un sacrificio de fuego.
3. Sāman (Sāma), versos métricos para ser recitados durante las ceremonias de la planta soma (droga psicotrópica que sólo los sacerdotes bráhmanas podían utilizar).

Se debe tener en cuenta que tanto el Iáyur como el Sāma vedá contienen muchísimos textos del Rig vedá original.
[editar] «Rig vedá»
Artículo principal: Rig vedá

El principal y más antiguo de los cuatro Vedás es el Rig vedá, una colección de 1028 himnos escritos entre el 1500 y el 1000 a.C con la misión de invitar a los dioses a los sacrificios, especialmente a Indra y a Agní.

En esa época primitiva Indradev era considerado el dios principal. Luego fue identificado con Paryania (dios de la lluvia) y terminó siendo un semidiós secundario, dios de la atmósfera, de las tempestades y los vientos (aunque ya los vientos tenían otro regente: el dios Vaiu).

Agní, dios del fuego (tiene el mismo origen que la palabra latina "ignis" (fuego) de donde viene el prefijo español igni, como en ígneo o ignífugo).

En realidad el Rig vedá es el único trabajo original, y mucho más antiguo. El más antiguo de sus himnos ha sido fechado (de acuerdo a ciertos cálculos astronómicos relacionados con la precesión de los equinoccios) entre el 4000 y el 2500 a. C. mientras que otros estudiosos lo fechan entre el 1400 y el 1000 a.C cuando los arios apenas se estaban estableciendo en el Panyab (noroeste de la India), antes de entrar en el valle del Ganges.

Más tarde a estos tres Vedás se les agregó el Átharva vedá, el cual no debe de haber sido aceptado hasta bastante después de Manu, ya que él en su Mánava sastra dharma (las ‘escrituras religiosas de Manu’, las Leyes de Manu) sólo habla de tres Vedás (llamándolos traiam brahma sanātanam, el vedá triple y eterno'). Sólo una vez (en Manu 11.33) menciona las revelaciones que había tenido el sabio Átharva y Angira aunque no los nombra con el nombre más moderno de Átharva vedá.
Iáyur vedá
Artículo principal: Iáyur vedá

El Iáyur vedá (‘conocimiento sobre sacrificio’) contiene dos divisiones: el Taittiriya samhita y el Vajasaneyi samhita.
Sāma vedá
Artículo principal: Sāma vedá

El Sāma vedá contiene un agregado de canciones para ejecutar con ritmos (tala) y melodías tradicionales (raga); exorcismos y encantamientos; creencias y por fin plegarias devocionales.
Átharva vedá
Artículo principal: Átharva vedá

El Átharva vedá es —como el Rig vedá—, una verdadera colección de himnos originales mezclados con encantamientos, con muy pocos préstamos del Rig y sin ninguna relación directa con los sacrificios de fuego.

Los hindúes creen que su recitación produce una larga vida, cura enfermedades, genera la ruina de los enemigos, etc.
Upanishads
Artículo principal: Upanishads

A los Vedás se les han añadido muchos comentarios, llamados Upanishads, que intentan explicar la naturaleza profunda de la realidad. Estos tratados místicos acerca de la naturaleza de Dios y la relación entre el alma y la materia, se volvieron los verdaderos Vedás de los religiosos hindúes, y fueron los que generaron los seis dárshanas o sistemas principales de pensamiento del hinduismo.
Otras partes de los «Vedás»

Los libros sagrados del hinduismo son más numerosos que los de cualquier otra religión. Además poseen la particularidad de que su seguimiento no es obligatorio. Se añaden otros escritos:

* los Bráhmanas, comentarios sobre los Vedás,
* los Upavedás (o Vedás secundarios),
* los Vedāngas, trabajos que funcionan como miembros (angas) del cuerpo védico, y
* los Āraniakas, conocimiento para ser aprendido como anacoreta en el bosque (arania).

También se incorporan un gran número de obras apócrifas (como el Kama Sutra) tenidas en gran estima y que, hoy en día, son mejor conocidas y ejercen mayor influencia sobre los hindúes que la literatura védica propiamente dicha.

PALABRAS DEL MAHARSHI..


El yoga que propongo alarga la vida e incluso da vida a los muertos. Lo he demostrado incluso en mi caso de ida y vuelta 18 veces. He demostrado la vuelta a la vida en mis hijos y en mis discípulos. No es sólo una mera reclamación. Puedo estabilizar el prana en ti en la medida en que continúes haciendo los ejercicios que sugerí. No entretengas tu mente en el pasado o en el futuro. Entrégate al presente y haz lo que tengas que hacer.

Puede que tu mente se desespere de vez en cuando. Éste es un truco de la mente que surge de tu psique. En tales momentos, haz viajes cortos de placer y a la vez no hagas que tus viajes se conviertan en una carga para ti. Tienes la habilidad de que las cosas se conviertan en una carga. El Yoga no es un sendero para una vida abrumada. Aprende a simplificar la vida y vive en la Luz...
Vaisakh,es un centro sagrado en los Himalayas desde tiempos antiguos...
Lo Divino funciona a través de los humanos elegidos. Es lo que la humanidad conoce como los Maestros de Sabiduría. En Sánscrito, los Maestros de Sabiduría se les llama “Maharshis”.

Unido así uno queda purificado, uno trasciende la personalidad, la mente y los sentidos. Uno conoce a lo Divino en los seres que le rodean. Estos no vacilan mientras actúan.

Comentario

En la sloka anterior el Señor habla de la buena voluntad en acción en la objetividad y del recuerdo constante en la subjetividad. Cuando uno se establece con estas mencionadas dos piernas de la vida, permanece estable en el centro, donde las horizontales se encuentran con las verticales. El nombre de este centro es el corazón. Cuando uno se estabiliza así en el corazón, y lleva a cabo obras de buena voluntad recordando al Divino en cada respiración, el corazón tiende a ser puro. El corazón es la fuente de la mente y de los sentidos. En la medida en que se purifica el corazón, en esa medida se limpia la mente y los sentidos dan percepciones ocultas además de lo mundano. Así, el resultado de este funcionamiento es un corazón puro, una mente limpia y una inteligencia despierta. Desde este estado de pureza, gradualmente uno también reconoce y se da cuenta de lo Divino en los seres que le rodean. En la medida en que ve a lo Divino en los seres que le rodean, se relaciona con los seres en ángulos rectos. Los ángulos erróneos se ajustan. Tales son los beneficios de la práctica del yoga. Cuando el aspecto doble del yoga, es decir, el acordarse de forma constante de “AQUELLO YO SOY” y la buena voluntad en acción se expresan como amor, el progreso de esta persona es rápido...
Los Maestros nacen de los hombres. Igual que de los árboles nacen los frutos, también de la humanidad nacen Maestros. Pero éstos no son tan numerosos como los frutos de un árbol. Cuando el árbol es estéril, no da frutos. Sin embargo, cuando de entre los hombres surge un Maestro, éste es fuente de inspiración para muchos. Un Maestro no tiene el deber de inspirar. Su mismo ser inspira. Un imán no tiene el deber de magnetizar. Es su misma naturaleza. El magnetismo impregna desde el imán. La Presencia impregna desde el Maestro. Cuando un ser recibe el toque de la Presencia, permanece inspirado y hace trabajo de buena voluntad inspirándose en el Maestro. Afortunados son los que encuentran a un Maestro entre ellos. Éstos, con el tiempo, pierden al Maestro en forma, pero, entretanto, su trabajo de inspiración hace nacer al Maestro en ellos y continúan así manifestando obras de buena voluntad con la misma inspiración. Cuando uno está totalmente inspirado, no busca ayuda en el entorno. Recibe ayuda desde los Círculos Superiores y la manifiesta en los círculos inferiores. Un auténtico discípulo no niega la ayuda cuando procede del entorno, pero esencialmente se orienta para hallarla procedente de los Círculos Superiores. Que aprendas a ayudarte a ti mismo con la ayuda del Maestro que hay en ti. Invoca y estate en la Presencia del Maestro. Este debería ser el coraje de un discípulo.



Un Maestro emite energías de contento, plenitud y alegría. Es un estado sin deseos. Su carencia de deseos se debe al contento. El contento no se alcanza mediante la negación de los deseos. Se alcanza por la plenitud en uno mismo. Uno mismo está pleno con la Presencia. Por tanto, no desea nada.

Reza pidiendo la plenitud. Reza pidiendo la Presencia. Que la Presencia descienda y te dé la plenitud. Por este camino de la plenitud, los deseos desaparecen. Es impráctico practicar el no desear. Es práctico invocar ardientemente la Presencia y su plenitud.

Cuando estás en la plenitud, ves a la Divinidad en tu entorno, en todos los seres, en todas las formas, en todos los lugares y en todo momento. Para ti la creación entera es sumamente hermosa en toda su variedad. Lo grande y lo pequeño, lo que tiene valor y lo que no lo tiene se ven como velos del UNO. También sonreirías ante la belleza de la ignorancia igual que te regocijas ante el esplendor del conocimiento. Esta es la ecuanimidad que adquieres cuando estás lleno de la Presencia.

Busca la Presencia y la plenitud y estate contento.

Vivir como un grupo tiene un principio cordial que es ver el alma en el otro. La convivencia de grupo o la vida colectiva es posible solo cuando vemos al ALMA UNA funcionando en muchos. Leyendo al alma, observando al alma, el recuerdo constante del alma te permite adquirir la aptitud para estar en el grupo. Pero por costumbre, un estudiante baja un escalón y ve las personalidades. Las personalidades son necesariamente diferentes. Se supone que son diferentes. Las personalidades no siempre se ponen de acuerdo. A una personalidad no le es posible estar de acuerdo con la personalidad de otro. En consecuencia, uno tiene que subir un peldaño en su conciencia para ser un alma. El alma es el terreno de encuentro de la vida grupal y la convivencia de grupo. El lugar del alma en cada uno de nosotros es el corazón. Abrazando el corazón puede haber un encuentro de las personalidades. No hay ningún otro lugar en que puedan ponerse de acuerdo. Incluso los cinco sentidos no se ponen de acuerdo entre ellos a menos que se encuentren en el corazón. Cuando no se encuentran en el corazón, los cinco sentidos os conducen en cinco direcciones diferentes.

La conciencia de alma es la única clave para la unidad. No hay ninguna otra clave.


El aunamiento es la elección de Dios, no la de los hombres. Los hombres pueden aspirar a él, pero deberían aprender a esperar. El aunamiento ocurre cuando Dios bendice. Él puede atraer a un ser hasta Él cuando lo cree conveniente. No hay condiciones establecidas para Él. Una vez alcanzada la cima de la conciencia, uno ha de ser humilde para esperar. El que espera es recompensado. El que exige no es recompensado. Hacerlo lo mejor que podamos y esperar a recibir es la lección básica de la naturaleza en cada paso. Que el discípulo deseche las quejas y siga trabajando. No hay ninguna otra manera.


Una mente regulada,

el sentido de estabilidad,

la pureza, una disposición amable,

la amabilidad

y la palabra agradable,

aumentan la riqueza de uno.

La decisión de seguir al Maestro es del discípulo. El Maestro no busca seguidores. Para seguir al Maestro uno necesita una mente inquebrantable y paciencia. Los actos del Maestro son a menudo incomprensibles y hacen surgir las dudas en el discípulo. La duda surge cuando la mente oscila. La anticipación y la expectación producen impaciencia.

Una observancia paciente y sin oscilaciones durante un ciclo de doce años establece la conexión. Una vez establecida la conexión, tiene lugar el flujo de energía del Maestro al discípulo, el cual transmuta, transforma y produce la trascendencia del discípulo.

Mira cómo la tortuga alimenta a su cría con la mirada. Ella la acaricia, aunque no resulte aparente. Así también el Maestro. Él no escenifica la aparente representación de la iniciación.

Las semillas de Vajravantul no caen en la raíz del árbol. Son llevadas por el viento hacia lugares lejanos, donde echan raíces. De igual modo el espíritu de un Profeta se manifiesta en la distancia, donde es apreciado.

Siempre hay una sombra bajo la lámpara mientras su luz ilumina los objetos circundantes. Así, los hombres inmediatamente próximos a un Profeta no le entienden. Aquellos que viven más allá son deleitados por su espíritu y su extraordinario poder.

Águila y serpiente. Materia y serpiente. El Maestro es el servidor.
Maestro y sabio. Serpiente física. Sirviente astral. Sabio divino. Santo celestial.



Comentario:

Cuando la conciencia del hombre se halla por encima del diafragma, nace el águila. Mientras se halle infradiafragmáticamente, permanecerá como serpiente. Ésta penetra profundamente en la materia. Es de todos conocido, que la serpiente vive en los agujeros de la tierra. Así también, el hombre que vive por debajo del diafragma, se profundiza en el mundo de la objetividad. Para el hombre que vive en la objetividad, el mundo material lo es todo. Vive enfocado sólo en lo material. Cuando el hombre adquiere el conocimiento sobre la futilidad y limitación de ir en busca de metas y experiencias materiales, lentamente se dirige hacia objetivos supermundanos. Oye y aprende acerca de los Maestros que viven una vida maravillosa, se siente atraídos hacia ellos, y se ocupa de trabajos que aquellos dirigen. Poco a poco se va convirtiendo en sirviente, en el sentido que se encarga de los actos de servicio en el grupo del Maestro. De este modo, del estado de serpiente pasa al estado de sirviente. Para él, el Maestro es el modelo a imitar y así trata de hacerlo. A medida que imita al Maestro, el aspirante practica ciertas virtudes que, gradualmente, le llevarán a ser un sabio en el futuro. Sin embargo, todavía está en el plano mundano, el de la serpiente física. Su aspiración le convierte en sirviente en el plano astral. Van pasando vidas y vidas. A su debido tiempo, se convierte en un sabio y, gradualmente también, en un Santo Celestial. Según el Maestro DK se necesitan normalmente 777 vidas para que un sirviente se convierta en Santo. Si bien, antes de esto, una innumerable cantidad de vidas habrán sido vividas por el hombre como serpiente, es decir, viviendo para objetivos y metas materiales.

La serpiente repta sobre la barriga, es decir, horizontalmente sobre la superficie de la materia. El hombre trabajado para su estómago (deseo mundano), se mueve también horizontalmente. Es por ello que al hombre mundano se le llama, simbólicamente, la serpiente. El águila se mueve hacia círculos superiores en un movimiento espiral, alcanzando cielos lejanos. El hombre que asciende desde Muladhara a Anahatha, se transforma a sí mismo en águila, y avanza hacia reinos elevados, llegando a Ajña. La serpiente se mueve en círculos igual que el águila. Ahora bien, este último, cada vez que completa un círculo, se eleva a un nivel superior. La diferencia entre el movimiento circular y el espiral requiere ser comprendida por el estudiante...

RUDRA

48. HANEYA...
Haneeya: Significa ‘el que da muerte a los que matan’. Rudra, en su aspecto superior, es muerte para la muerte, queriendo decir que mata la muerte y permite a los seres experimentar el estado de no muerte. No sólo es el Señor de la Muerte sino también el Señor del Sendero de la Inmortalidad. Los seres que veneran a Rudra, por Su gracia, salen victoriosos y pasan conscientemente a través de los portales de la muerte. Rudra es el Señor de la vida y de la muerte. Él confiere la vida sutil, que es vida más allá de la muerte. Concede la entrada a la vida sutil a aquellos que siguen el sendero del conocimiento y del yoga. Él da la muerte a los que necesitan morir para tener un nuevo comienzo. De este modo, actúa de ambas formas con la muerte (para liberar y para destruir).


Cuando el silencio absorbe tu ego (la personalidad)

se libera una energía ilimitada.El ego es el cuello de botella,que limita la energía
y malgasta la energía limitada.
El fuego en nosotros está trabajando como calor latente en las células del cuerpo, como calor activo en la respiración y como el fuego de la mente. Justo cuando los palos de combustible se establecen en el fuego, la llama surge en posición vertical. Así también el fuego de Kundalini tiene que surgir verticalmente, uniendo los tres fuegos. Cuando sucede, el hombre se manifiesta con brillantez. Este ascenso le sucede al hombre cuando el calor latente en el cuerpo en las células del cuerpo se unen con el calor de Prana en Muladhara y se eleva como una llama para hacer frente al fuego de la mente, que es como un manto. Cuando la llama de la subida de Kundalini toca el manto, el manto se ilumina. Ese brillo del manto es mil veces más luminoso que la luz de la mente. Tal es el propósito del ritual del fuego. El devoto invoca, invita, adora, ofrece palos como único combustible para prender el fuego. Este mismo trabajo sucede en nuestro interior y así los fuegos se unen y el objetivo se cumple. El ritualista en este himno debe recordar el objetivo mismo de su culto y también establecer un objetivo. Tratar de llegar a la meta con la ayuda del Señor Agni:
43. ARCHAN TA STVHAVMAHE

ARCHANTAH SAMI DHI MAHI

AGNE ARCHANTA UTAYE!


Lo Supra-Cósmico está más allá de la existencia cósmica. Hay pocas inteligencias más allá de la Cósmica. Los dos Aswins son supra-cósmico. Los Gandharvas son supra-cósmicos. Ellos son eternos. Cuando decimos que el Señor Narayana o Brahman, contrario de Brahma, el Creador, Parameshwara, todos ellos son supra-cósmicos. Por ejemplo Mahaparanirvana es el séptimo plano más allá del cual las inteligencias mencionadas existen. A Para, Prakruthi y Parabrahman también se les conoce como supra-cósmicos. La Existencia Pura, que se alcanza en el Samadhi, es también supra-cósmica. Cuando cualquier inteligencia entra dentro de lo Cósmico, se vuelva activa. Incluso el plano de la actividad es un plano cósmico. El plano de Seidad es supra-cósmico. Hay pocas inteligencias que son supra-cósmicas y que tienen acceso a la actividad cósmica también. Esta es una breve explicación de la diferencia de los dos.

Desarrollad una mente limpia. Una mente limpia es una mente transparente. Una mente transparente transmite mayor luz, recibiendola de los circulos mas altos. Esta permanece brillante como la electricidad.

No dejeis que vuestra mente aprenda a manipular, hablar falsedades, inducir a error a los demas. Aseguraos de esto diariamente. En caso contrario, la mente distorsiona, manipula por conveniencia. Una mente manipuladora no puede ser estable. Resulta altamente mutativa. No puede estar en paz. No puede llevar a cabo actos nobles por largo tiempo. Desarrolla debilidad. Se tortura con sus propias dudas. Por lo tanto decae y muere.

Los sabios de antaño siempre prefirieron una mente limpia y transparente que permitiera al hombre gozar de lo preciado de los regalos Divinos. Aseguraos que vuestros pensamientos, habla y acciones son limpios. A esto se le llama alineamiento. Cuando los tres aspectos esten alineados en vosotros, sereis transparentes. Cuando se es transparente, las energías sutiles y Divinas se transmiten a través de uno, desde lo mas profundo de vuestro ser. Esa es la verdad.