viernes, 9 de abril de 2010

 


El Amor
Desintegra Toda Suspicacia,

El Silencio y el Respeto
Sublimiza la Humildad.

Sí tu Mirada se Alza Alta,
El Esfuerzo Que Tengas Que Emplear
Será Similar de Alto.

Sé Consecuente Contigo Mismo
Y no Dejes que tu Mente,
Ni que Tus Labios Blasfemen y Atestigüen Contra Ti.

Si Habéis de Encontrar el Silencio del Alma,
Debéis Preparaos a Vosotros Mismos Para La Senda.

Nadie Sino el Que es Puro de Corazón Puede Entrar en Ella.

Y debéis descartar toda tensión mental,
toda angustia de los negocios,
todos los miedos,
todas las dudas
y todos los pensamientos conturbados.

“Vuestra voluntad humana
Debe estar a disposición de Vuestra Voluntad Divina”.


Shuélffèltôs