El triple poder, orgulloso, envía refuerzos a sus emanaciones para combatir el poder de Jesús

viernes, 27 de agosto de 2010

 




XIX 1. Y Salomé se adelantó, y dijo: Señor, tu fuerza de luz ha profetizado esto por boca de David, en el salmo cincuenta y uno.
2. Diciendo: ¿Por qué el impío se alaba de su malicia?
3. Y cuando Jesús escuché estas palabras, dijo: Está bien, Salomé.
4. Y en verdad, en verdad, os digo que yo os instruiré en todos los misterios del reino de la luz.
5. Y Jesús continuó hablando y dijo a sus disçípulos: Me aproximé luego al caos.
6. E iba revestido de una luz inmensa, para quitar su luz a la fuerza con faz de león.
7. Y cuando la fuerza con rostro de león me vio, tuvo miedo, y llamó a su dios para que la socorriese.
8. Y se llenó de cólera y la fiel Sabiduría sintió gran espanto.
9. Yse dirigió a mí y dijo: No me olvides, ¡oh luz!
10. Porque mis enemigos han abierto su boca contra mí.
11. Y han querido arrebatarme mi luz y me han odiado.
12. Porque yo entonaba tus alabanzas y te amaba.
13. Que sean sumergidos en las tinieblas exteriores; arrebátales su fuerza y no los dejes remontarse a sus regiones.
14. Y que el caos los envuelva como una vestidura.
15. Ten piedad de mí, ¡oh luz!, por el misterio de tu nombre, y sálvame en tu misericordia.
16. Ven a mi ayuda, porque mi fuerza es destruida.
17. Porque aquí no hay ningún misterio, y mi matena ha sido encadenada, porque se me ha quitado toda mi fuerza.
18. Y que aquel que haya sido animado en su interior, se adelante y explique las palabras de la fiel Sabiduría.
19. Y Andrés dijo: Señor, tu fuerza de luz ha profetizado esto.
20. Cuando dijo por boca de David, en su salmo ciento ocho: Dios mío, no calles en mi elogio, porque los pecadores y los pérfidos han abierto su boca contra mí.
21. Y el primer misterio, continuando su discurso, dijo de esta manera:
22. Y ocurrió que yo no saqué aún del caos a la Sabiduría fiel.
23. Porque yo no había recibido todavía la orden de mi Padre.
24. Y las emanaciones del triple poder, viendo a la Sabiduría fiel otra vez provista de luz como lo fue desde el principio, se detuvieron en sus ataques a la Sabiduría.
25. Y a grandes gritos pidieron asistencia al triple poder.
26. Para que él los ayudase a arrancar otra vez a la fiel Sabiduría las fuerzas que había en ella.
27. Y el triple poder envió otra gran fuerza de luz, que descendía en el caos como una flecha que vuela.
28. Y era para que ayudase a sus servidores a arrebatar a la Sabiduría fiel la fuerza que le había sido reintegrada.

Jesús confunde a las fuerzas del triple poder

XX 1. Y cuando aquella fuerza de luz hubo descendido, los servidores del triple poder tuvieron gran confianza.
2. Yotra vez persiguieron a la Sabiduría fiel, que estaba llena de turbación y espanto y la atormentaron cruelmente.
3. Y uno de ellos se transformó en un basilisco de siete cabezas.
4. Y otro tomó forma de dragón, y la primera potencia del triple poder, con cabeza de león, y otros muchos se reunieron.
5. Yatacaron a la fiel Sabiduría, y la llevaron de nuevo a las regiones inferiores del caos, y la atormentaron mucho.
6. Y ella huyó, y vino a las regiones superiores del caos, y ellos la persiguieron y la torturaron cruelmente.
7. Y Adamas el tirano miró las doce regiones de los eones, y también sintió coraje contra la Sabiduría fiel.
8. Porque había querido subir a la luz de las luces, que está por encima de todos ellos.
9. YAdamas miró, y vio que los enemigos de la Sabiduría la atormentaban hasta quitarle cuantas luces había en ella.
10. Y cuando la potencia del triple poder hubo descendido en el caos, encontró la fiel Sabiduría.
11. Yla fuerza con rostro de león, y la fuerza con rostro de serpiente, y la fuerza con rostro de basilisco, y la fuerza con rostro de dragón, y todas las fuerzas del triple poder rodearon a la fiel Sabiduría, queriendo arrebatarle por segunda vez sus fuerzas.
12. Y cuando la atormentaban y afligían, ella se dirigió otra vez a la luz.
13. Y dijo: Luz en la que he caído, que tu luz venga a mí.
14. Porque tú eres quien me ha tomado en ella y tú me librarás de mis perseguidores.
15. Y cuando la Sabiduría fiel hubo hablado de este modo, por orden de mi Padre, yo envié a Miguel, y a Gabriel, y a los satélites de la luz.
16. Para que llevasen a la Sabiduría fiel sobre sus manos, a manera que sus pies no tocasen las tinieblas exteriores.
17. Y les ordené que se dirigiesen a las regiones del caos en donde la tenían que conducir.
18. Y cuando los ángeles y las emanaciones de la luz hubieron descendido al caos, todas las emanaciones del triple poder y las de Adamas vieron la emanación de la luz y constituyeron una luz inmensa, a la que ninguna clase de luz era ajena.
19. Y quedaron atemorizados y dejaron a la Sabiduría fiel.
20. Y una gran emanación de luz rodeó por todas partes a la Sabiduría, a derecha e izquierda, y sobre su cabeza se levantó una corona de luz.
21. Y cuando la emanación de la luz rodeó a la fiel Sabiduría, ésta se sintió llena de confianza.
22. Y aquella emanación no dejaba de rodearla y ella no tenía ya las emanaciones del triple poder.
23. Y los servidores del triple poder no pudieron transformar más su figura, ni aproximarse a la Sabiduría fiel por la gran luz que la rodeaba.
24. Y no pudieron hacerle ningún mal, porque ella creía en la luz.
25. Y según el mandato de mi Padre, el primer misterio descendió en el caos.
26. Y ataqué a la potencia del rostro de león, que era la mayor luz, y le arrebaté toda su luz.
27. Y herí a todas las emanaciones del triple poder y todas cayeron, impotentes, en el caos.
28. Y conduje a la fiel Sabiduría a la derecha de Miguel y Gabriel.
29. Y una gran emanación de luz entró en ella.
30. Y miró a sus enemigos, cuya luz había arrebatado yo completamente.
31. Y la hice salir del caos y puse a sus pies los servidores del triple poder que tienen rostro de serpiente.
32. Y el servidor que tiene forma de basilisco de siete cabezas, y la potencia de faz de león y la potencia de faz de dragón.
33. E hice permanecer la Sabiduría encima de la potencia que tiene el aspecto de un basilisco de siete cabezas, y que es la más fuerte de todas en su malicia.
34. Y yo, el primer misterio, he estado encima de ella, y he quitado todas sus fuerzas, y he destruido toda su materia, para que no pueda retoñar.